El Mariquelo, Salamanca, España
El Mariquelo es un personaje típico de Salamanca que cada año en víspera de la festividad de Todos los Santos sube al campanario de la catedral nueva para conmemorar el hecho de que el terremoto de Lisboa de 1755 hizo sonar las campanas, afectando mucho a la estructura de la torre.
Desde entonces, un varón de la familia de los Mariquelos ha cumplido con la tradición hasta 1976, cuando esta costumbre murió. En 1985, Ángel Rufino de Haro decidió reanudar la tradición y cada año, ataviado con el traje típico charro, sube hasta el punto más alto de la torre de la catedral para tocar una charrada con el tamboril y la gaita.
Las calles Gibraltar y Setenil (hoy Patio Chico) se llaman así supuestamente porque los ejércitos que conquistaron estas ciudades a los árabes en el siglo XV estaban compuestos mayoritariamente por salmantinos.